Un ámbito literario complicado
Hablar sobre literatura polar en nuestro país es complicado. España ha vivido al margen de las grandes aventuras polares, que se desarrollaron en el siglo XIX y XX, y tampoco nuestros escritores se han sentido atraídos por este género. Por lo que, en la mayor parte de los casos, las editoriales se han visto abocadas a la traducción de libros escritos en otros idiomas y países, bien por los mismos exploradores o por escritores profesionales.
Tampoco, hasta época muy reciente, los lectores se han interesado por estos libros. Aunque creo que desde hace unos años esta situación está cambiando. Por lo que, para tratar de guiar los pasos iniciales de esos primeros lectores, o para sugerir lecturas adicionales a los lectores consumados, quizás sea bueno hacerles unas sugerencias. Sin lugar a dudas, será mi opinión personal y por lo tanto estará impregnada de mis gustos y preferencias. Aunque eso sí, por razones éticas, no haré la más mínima referencia a mis propios libros.
Iniciarse en este mundo polar a través de su literatura puede ser árido y en muchos casos frustrante. Los buenos exploradores no suelen ser buenos escritores, por lo que los libros que escribieron al término de sus expediciones, con un objetivo más económico que divulgador, no suelen ser obras de arte. Sin lugar a dudas, hay excepciones como Nansen o Scott.
Después, debemos considerar cuándo se llevaron a cabo sus exploraciones, por lo que el lenguaje es decimonónico, es decir abundante, prolijo en descripciones y excesivamente detallista y muchas veces, simplemente, pesado. Lo que suele representar una dificultad para el lector actual.
Por otra parte, debemos considerar el problema de las traducciones. Soy consciente de que existen magníficos traductores en nuestro país, entre ellos tengo buenos amigos, pero un buen traductor es caro, y algunas editoriales -considerando que las ventas no van a ser muy numerosas- tienden a optar por traducciones “baratas”, con un resultado, en el mejor de los casos, incierto.
Por supuesto que habría muchos más factores a considerar, pero como no me he propuesto hacer un ensayo sobre el tema, sino simplemente tratar de servir de ayuda para los lectores, voy a sugerir algunos títulos.
Una selección de títulos
Sé que se considera a “El peor viaje del Mundo”, de Cherry Garrad, como el arquetipo de la literatura polar, pero yo no lo recomendaría para iniciarse. En su lugar yo propondría “Endurance. La prisión blanca”, de Alfred Lasing (Capitán Swing, 2014), mucho mejor que el famoso “Atrapados en el hielo”, de Caroline Alexander.
También recomendaría sin lugar a dudas dos libros del mismo autor Fergus Flemming, uno “La conquista del Polo Norte” (Tusquets, 2012) y el otro “Barrow y sus hombres” (RBA 2005), aunque este último no trata sólo de tema polar. Son dos libros contienen una gran información resumida.
No puedo dejar de sugerir dos libros pequeños pero deliciosos que, a mí, personalmente, me han encantado: “Estética del Polo Norte”, de Michel Onfray (Gallo Nero, 2017) y “Una mujer en la noche polar”, de Christiane Ritter (Ediciones Península. 2019). Estos dos se leen enseguida y dejan un buen sabor de boca.
Tampoco puedo dejar de mencionar: “Perdidos en el Ártico”, de Ejnar Mikkelsen (Ediciones del Viento, 2022), que acaba de ser editado. “En el reino del hielo” (Capitán Swing ) y “Erebus”, de Michael Palin, (Ático de los Libros).
Para terminar, tengo que incluir “Sueños Árticos”, de Barry López (Capitán Swing, 2017). Una obra de arte que es necesario leer sin prisas, cada día un poquito.
Y nada más por ahora. Si os gusta mi selección, otro día podríamos ampliarla.
Epílogo de Literatura del Mundo
Aunque Javier Cacho no ha mencionado sus propios títulos por una cuestión de ética, desde la web Literatura del Mundo sí lo haremos, primero porque por su alcance, contenido y nivel tienen que estar en cualquier relación de libros de literatura polar que se precie, y segundo, en agradecimiento por su colaboración con la web.
Javier ha escrito por un lado sobre las biografías de algunos de los grandes exploradores polares en “Amundsen-Scott: duelo en la Antártida. La carrera al Polo Sur” (Fórcola, 2011), “Shackleton, el indomable” (Fórcola, 2013), “Nansen, maestro de la exploración polar” (Fórcola, 2017) o “Yo, el Fram” (Fórcola, 2018) -este sobre el barco con el que gran parte de las principales exploraciones polares fueron llevadas a cabo-, y por otro lado, ha escrito sobre la Antártida (un territorio que conoce bien por haber vivido y desarrollado trabajos científicos en él), con "Héroes de la Antártida" (Fórcola, 2019), “Antártida, el agujero de ozono” (Tabapress, 1989) o con artículos para la revista digital La Línea del Horizonte.
